
La tumba de las luciérnagas es la obra maestra de Isao Takahata, y una de las mejores películas de la historia del cine, ya sea de animación o no.
Aún sabiendo desde el principio el final de la historia (basada en hechos reales, que ya fueran reflejados en un libro por Akiyuki Nosaka, de forma autobiográfica) Takahata juega constantemente con los sentimientos del espectador, sin recurrir a la sensiblería ni al maniqueísmo, entremezclando momentos entrañables y de gran belleza con crueles caídas al abismo de los dos hermanos protagonistas. Todo ambientado perfectamente en su contexto histórico, y cuidando los detalles de manera que todo resulte realista y creíble.
La animación es excelente para la época, retratando sin paliativos las calamidades producidas por los bombardeos, y con el mérito de no mostrar apenas imágenes de guerra. Destacaría especialmente la animación de Setsuko, sus movimientos, expresiones y reacciones son los de una niña de su edad, y hace que el espectador le coja afecto al instante.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada